Puertas

© AUOR 2015
Para asegurarse de que todo el mundo pueda pasar por las puertas y otras entradas, deben seguirse dos normas básicas:
- El ancho de la entrada debe ser de 90 cm por lo menos.
- Ha de haber espacio suficiente cerca de la entrada (al menos 150 cm de radio de giro) para permitir que los usuarios de sillas de ruedas y otras personas con problemas de movilidad maniobren con facilidad.
Las manijas de las puertas han de tener fácil agarre y uso, para aquellas personas que tienen dificultades para utilizar las manos, para usuarios de sillas de ruedas, y también para personas de baja estatura y niños pequeños.
Las puertas destinadas a proporcionar privacidad y seguridad deben tener un cerrojo adecuado.
Los cercos de las puertas deben tener colores de alto contraste para facilitar su identificación a las personas con deficiencia visual. Si no hay cerco para asegurar el contraste, puede pintarse un borde de 5 cm, o marcarse con cinta adhesiva (por ejemplo, para la entrada de una carpa).

© CBM 2015
Sources
CBM. Inclusive post-disaster reconstruction: Building back safe and accessible for all. 2015.